
Anoche lloré un poco. Nada grave, unas lágrimas de melancolía, ni siquiera de tristeza. Una melancolía mediocre y tibia. Inútil. Mi perra se había acostado conmigo y le habrá llamado la atención algún sonido que hice porque levantó la cabeza y me miró fijo a los ojos moviendo un poco el hocico, oliendo, como si tratara de entender lo que pasaba. Si hablara seguro hubiese preguntado. Le pasé la mano y le sonreí, se me apoyó en el pecho sin sacarme los ojos de encima y suspiró de una manera tan humana que creo que lloré más por eso que por cualquier otra cosa. Se me acercó más todavía, hecha una bolita, hasta que el hocico me tocó el mentón y finalmente, en un acto de ternura inexplicable, me lamió la cara como quien da un beso o cura una herida.
Hay momentos pequeñísimos (creo que en la vida de todo el mundo) en los que creemos ciegamente en cosas que en otras circunstancias nos parecería estúpido creer, sino imposible. Anoche la miré a mi perra y ví tristeza en sus ojos, el gesto de alguien que hace silencio y compañía en un momento de dolor y puse en su lugar a más de una persona que hubiese querido estar mirando de frente en ese momento, le inventé cara y manos y dejé que extendiera una de esas manos y me acariciara. Luego simplemente pegó un salto, se sacudió y se fue a jugar con su pelota debajo de la cama...
2 comentarios:
Los ojos dicen mucho
te quiero (L)
el otro día charlaba con joni y de fondo la banda sonora de ameliè.
en eso entró mi perro al cuarto...
después de saludar a joni -y ensuciarle el pantalón (cosa q hace todos los días y joni le dice:"ay Bonito! ya no te quiero más, sos malo" ajjajajja)-
se paró frente al equipo de música
y movía la cabeza lentamente de un lado a otro, al compás de un acordeón...fue muy cómico.
y si. yo humanizo demasiado a mis perros, pero te juro que a vces cuando me miran siento que me entienden.
que lo parió.
cariños, ♥
Publicar un comentario