miércoles

Te lo comparto. Es un regalo, podés escucharlo mientras cocinás, o te bañás, desnudo después de bañarte o con las piernas contra la pared. Podés pensar en mí o en quien te haga feliz, no tiene fecha de vencimiento y lo podés repetir todas las veces que quieras sin compromiso de beso, y sin compromiso de compra. Y es para vos aunque quizás nunca veas ésto.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

¿ Y si justo, por esas casualidades de la vida... lo veo y acepto el regalo ? =D

Anónimo dijo...

Yo creo que lo vió.